2 oct 2011

La vita è.... bella!!!

Anche più corta!! Esta es una frase que más de un abuelo o tío de avanzada edad nos repetirá en cuanto vea a nuestra joven sonrisa asomar una y otra vez. La vida es hermosa, es adorable, nos da alegrías y pesares. A veces vamos hacia adelante, a veces no sabemos ni dónde estamos. Sea como fuere, la vida sólo se vive una vez, y es demasiada corta como para no aprovecharla. Pasamos por ella casi sin darnos cuenta.
Hace bastante tiempo, en una de las primeras cartas que solemos intercambiar con un amigo casi semanalmente, le expresaba la sensación que tenía ante la vida. Ahora no creo que lo pueda reproducir literalmente, aunque sí recuerdo perfectamente que sentía que la vida estaba para ser compartida. Y así lo siento. Siento que si la compartimos se multiplica. Este es el sentimiento más íntimo que se me repite a irme a dormir. Y siendo tan corta, si uno la comparte, la trasciende, y en esta trascendencia se puede ver a uno mismo multiplicándose en las miradas de los demás, en sus manos y en sus palabras. La vida es demasiado corta, demasiado corta como para quedarse con todo para uno mismo. Intento a menudo entender porque la gente acumula y acumula cosas, dinero y bienes... para....??? Evidentemente que no será para ellos mismos, porque en el momento que dejen de respirar tendrán un montón de “..” para no compartir. Que lástima!
Si de todo este tiempo, estas sonrisas, estas lágrimas y estos bienes que nos rodean, somos capaces de brindar al resto una parte, de renunciar a esa parte que no nos exime de la necesidad primigénia, podremos ver que se multiplica al sucederse en otras manos. Debemos de tomar conciencia de hasta qué punto nos es necesario un tiempo, una película o una moneda para nosotros y cuánto de todo ello está de más.
A partir de aquí, sé que cada uno verá si lo acumula, si lo cede o bien si se lo queda para sí.

Imagina la tua vita condivisa” 




 

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